¿Cómo será 2024? Sectores económicos se entusiasman con mejores resultados, pero sin decir adiós a la cautela

Ad portas del fin de año, los ojos de los diferentes agentes económicos ya están puestos en 2024 y lo que implicará.

Este jueves, diversos gremios participaron en el seminario “Proyecciones Económicas 2024: ¿Sólo mejores cifras o una verdadera recuperación?”, organizado por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), donde entregaron el balance de sus respectivos sectores.

Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo de María Teresa Vial, presidenta de la CCS, quien aseguró que se divisa una “tímida recuperación”.

La dirigenta mostró preocupación por el “escenario complejo” del mercado laboral, y la incertidumbre política que atraviesa Chile. 

En este contexto, Vial aplaudió el trabajo del Banco Central y como “la inflación entrega buenas noticias”, aunque instó a un recorte en la Tasa de Política Monetaria (TPM) más agresivo.

Manufactura pierde terreno

El director de políticas públicas de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Rodrigo Mujica, comenzó su presentación resaltando que la industria manufacturera ha ido perdiendo participación en el Producto Interno Bruto (PIB) en los últimos años.

En 2023, las cifras han sido negativas y consistentemente peores a la actividad agregada, señaló. “Es un año bastante negativo”, agregó, donde gran parte de los sectores han retrocedido.

Con una “economía absolutamente débil”, su proyección es que la manufactura caerá un 1% en 2023 y ya para 2024 prevén un repunte “muy marginal” de entre 0,5% y 1%.

Agricultura divisa mejoras

“¿Cómo finalizará la agricultura el año 2023? Mal”. Con esa frase comenzó su presentación el gerente de estudios de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Francisco Gana. 

En el año, todos los sectores ligados al campo acusan caídas debido, entre otros factores, a un invierno “más cálido de lo que esperábamos”.

Así, la agricultura cerraría con una caída del PIB de 1,3%. 

Hacia el próximo ejercicio, Gana señaló que esperan un crecimiento, “que es optimista, pero no es tampoco para celebrar”. Este sería máximo de 3,3%. 

“El país, como también se mencionó, enfrenta importantes incertidumbres en lo político y en lo económico, esto inhibe la inversión”, sumó el representante de la SNA, y explicó que esto no impactará en 2024, pero de aquí a cuatro años más “sí va a tener una influencia importante”.

Construcción cierra un mal año

No es un secreto que la construcción “no ha estado pasando por un buen momento”, declaró el gerente de estudios y políticas públicas de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Nicolás León.

Ante un 2023 que evidencia “un bajo nivel de inversión”, este rubro se ha visto golpeado.

“Lo que pasa en la inversión, es lo que pasa en la construcción”, explicó León. 

El representante del gremio expuso que el PIB del área lleva entre ocho y nueve años “estancado”.

De hecho, esperan cerrar este año con una baja de 4,3% de la inversión en construcción. Dentro de los elementos que explican este resultado, está un alza de los costos materiales, una demanda debilitada, condiciones restrictivas en el acceso al crédito, entre otros.

Hacia 2024, desde la CChC prevén un descenso de 0,4% en la inversión en construcción.

Comercio cruza los dedos

En cuanto a las ventas del comercio, las bajas bases de comparación aseguran al menos 1% de crecimiento en 2023, dijo el gerente de estudios de la CCS, George Lever. 

Ya hacia el primer o segundo trimestre del ejercicio venidero esperan ver cifras positivas. Lever asegura que la convergencia inflacionaria mejorará el poder adquisitivo, mientras que la baja de la TPM hará más asequible el financiamiento de durables.

Sumado a ello, el consenso espera una baja en el dólar. 

Aun así, hay preocupación con el mercado laboral. La proyección de la CCS es que el empleo mantendrá un ritmo de crecimiento acotado, al igual que las remuneraciones reales. 

Con todo, el consumo privado crecerá entre 1,5% y 2% el próximo año.

Turismo con camino por recorrer

“El turismo es un sector que aporta mucho a la economía”, aseguró a su turno secretaria general de la Asociación Chilena de Empresas de Turismo (Achet), Lorena Arriagada. 

Este año, a nivel internacional, la demanda de viajes mostró una recuperación sostenida.

En el caso de Chile, Arriagada recordó que el país fue “prácticamente el último del mundo que se abrió post pandemia y eso nos ha causado algunas dificultades importantes en el rezago de la reactivación”.

La tendencia mundial señala que al principio de 2025 ya se alcanzaría una recuperación del 100% de la pandemia.

A la fecha, Chile se recupera “paulatinamente”. Para la temporada alta 2023-2024, las agencias de viaje, en su mayoría, perciben un mejor panorama que en la anterior.

Ante esto, 2023 finalizaría con un aumento entre 0% y 0,5%, mientras que el próximo año se lograría una cifra entre 1,5% y 2%.

Banca en buen pie

“El crédito se encuentra en un ciclo contractivo prolongado. La caída actual es más profunda y persistente”, planteó el gerente de estudios de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras de Chile (ABIF), Matías Bernier. 

En su diagnóstico, afirmó que “los programas estatales no han sido suficientes para revertir la caída en la demanda”. A su vez, la carga financiera de las empresas ha subido “fuertemente”. 

Para el próximo año, esperan lograr un aumento de 5% en las colocaciones totales. Esto “tampoco es una cifra para estar muy felices”, dijo Bernier, pero como gremio estarían “en buen pie para enfrentar un escenario difícil”.